31 May Diseño del cuarto de lavado y planchado: mejores ideas

El diseño de cuarto de lavado y planchado cobra cada vez más importancia cuando se trata de distribuir los espacios en las casas de gran tamaño. Si hay espacio suficiente, es buena idea aprovecharlo para crear rincones que sean realmente útiles y prácticos.

Hacer la colada es absolutamente necesario en todos los hogares, y mucho más cuando la familia es grande y hay niños. Pero nadie quiere tener la ropa dando vueltas de un lado para otro hasta que llegue el momento de lavarla y plancharla. Por eso, un cuarto para hacer la colada resulta especialmente útil.

Sí, además, conseguimos que este lugar tenga una bonita decoración, el momento de hacer la colada resultará mucho más agradable.

¿Dónde instalar el cuarto de lavado y planchado?

Nadie quiere tener que recorrer toda la casa con un montón de ropa para lavar, con el cubo de la ropa mojada, o con la ropa ya seca y lista para planchar. De ahí que lo más razonable sea instalar esta habitación en un lugar que haga que los desplazamientos con la ropa a cuestas sean los mínimos posibles.

En casas de una planta, el cuarto de lavado y planchado puede estar ubicado al lado de la cocina, cerca de la salida a la zona de tendedero.

Cuando se trata de distribuir una casa de dos plantas, lo más inteligente es instalar el cuarto para la colada en la planta superior. Esto evitará que los miembros de la familia tengan que estar subiendo y bajando con la ropa que necesita ser lavada, planchada, o colocada en los armarios cuando ya esté lista.

¿Qué tal si potenciamos la luz natural?

La colada no es una de las tareas domésticas que más suelen gustar, y mucho menos la plancha. Pero resultan más agradables de llevar a cabo cuando se hacen en un espacio bonito y bien iluminado.

Por eso, es importante potenciar la luz natural en este tipo de estancias. Las ventanas, cuanto más despejadas estén, mucho mejor. En caso de querer “vestirlas” las mejores opciones son los estores.

Colores en el diseño de cuarto de lavado y planchado

A fin de potenciar esa luminosidad de la que acabamos de hablar, es interesante que los colores escogidos para la decoración no sean muy oscuros.

La encimera siempre da buenos resultados si se escoge en color blanco o en los tonos más claros de la madera. Los armarios, si los hay, pueden tener un toque de color para que la estancia no resulte anodina, pero el tono no debería ser intenso. Una buena opción son el beige, los colores pastel, o el gris claro.

Para darle a esta habitación un toque más personal, se puede instalar papel en las paredes. Eso sí, a la hora de elegir papel pintado, es recomendable escoger versiones resistentes a la humedad, porque en un cuarto de este tipo puede acumularse bastante, especialmente cuando la secadora está funcionando.

Colocación de los electrodomésticos

La lavadora y la secadora son las grandes protagonistas de esta habitación. A la hora de ubicarlas hay que pensar en la estética, pero también en la practicidad.

Si es posible, procuraremos la colocación en paralelo. De forma que la ropa pueda ir fácilmente de la lavadora a la secadora. En caso de que esto no sea viable, siempre está la opción de crear una columna colocando un electrodoméstico encima del otro.

No pueden faltar las estanterías

Aunque la estancia tenga armarios, en una habitación de este tipo el espacio de almacenamiento nunca sobra. Por eso, es interesante instalar una o dos estanterías encima de la zona de la encimera.

Pueden servir para dejar los productos de limpieza fuera del alcance de los niños, pero también para dejar la ropa doblada y planchada a la espera de ser llevada a los armarios correspondientes.

Cestos que se integran en la decoración

Lo que nunca puede faltar en un cuarto para la colada es un cesto para la ropa. De hecho, si hay espacio, es interesante contar con varios. Por ejemplo, uno para la ropa blanca y otro para la oscura. Si cada miembro de la familia se acostumbra a separar la ropa, poner la lavadora será mucho más rápido.

También puede haber otro cesto en el que se va a almacenar la ropa ya limpia que está a la espera de ser planchada.

Los cestos, lejos de convertirse en un obstáculo que está en medio, pueden integrarse fácilmente en la decoración. Hoy en día es sencillo encontrar modelos muy estéticos.

Algo de espacio para colgar la ropa

Hay prendas que nada más plancharlas tienes que colgarlas para que no se arruguen, como ocurre con las camisas. Esto no se convertirá en un problema si en el cuarto de lavado hay un espacio destinado a esto.

Unos sencillos ganchos pueden cumplir de sobra con esta función. Eso sí, hay que procurar que su estética encaje con la del resto de la estancia.

Mesa de planchado que sea móvil

La mesa de planchado es imprescindible en una estancia de este tipo. Lo recomendable es que vaya a juego con el resto del mobiliario o, al menos, encaje bien el estilo escogido para la habitación.

Una buena opción es escoger un modelo de mesa de planchado que tenga ruedas. Esto permitirá colocarla en el centro de la habitación cuando haya que trabajar en ella, y retirarla a un lugar en el que no moleste cuando no se esté utilizando.

Es interesante que la mesa de planchado cuente con estanterías y cajones o cajas. Esto facilita el tener a mano elementos que pueden ser necesarios, como un costurero o un cepillo para la ropa.

El diseño de cuarto de lavado y planchado requiere una buena planificación para que no falte nada de lo necesario y el espacio no resulte agobiante. Con una decoración bien estructurada y un diseño bonito, hacer la colada puede convertirse en un placer.